El síndrome meníngeo es causado por la inflamación de las meninges, con mayor frecuencia en la aracnoides o la duramadre. Esta inflamación es causada por una infección bacteriana o viral o por una hemorragia meníngea.
Síntomas El
síndrome meníngeo se manifiesta por tres signos principales: rigidez en el cuello, dolor de cabeza intenso y vómitos. Es vomitar sin preceder a las náuseas sin el menor esfuerzo. Los dolores de cabeza son particularmente intensos, pulsátiles (o palpitantes) y exacerbados por la luz (de ahí la fotofobia), el ruido, pero también por los movimientos de la cabeza. En lactantes y niños, el síndrome meníngeo es más difícil de detectar y se manifiesta principalmente por hipotonía, somnolencia inusual y estreñimiento. En los casos más graves, la inflamación de las meninges puede provocar alteraciones de la conciencia en los adultos (confusión, obnubilación, etc.) y convulsiones en niños y lactantes.
El tratamiento del dolor de cabeza con belladona
alivia los dolores de cabeza pulsátiles. Debe tomar 5 gránulos de 5 CH cada hora hasta que el dolor desaparezca. Los gránulos de Gelsenium sempervirens 15 CH también son efectivos y es aconsejable tomarlos cada 2 horas.
Tratamiento de los trastornos neurológicos
Las molestias relacionadas con la hipertensión intracraneal, como la rigidez del cuello, la cefalea y la hipersensibilidad neurológica, se pueden tratar con Solanum nigrum 4 CH a 9 CH.
Fotofobia
En caso de fotofobia, se recomienda el uso de Gelsenium sempervirens. Se presenta en forma de ampollas bebibles, gotas, polvo diluido o tintura madre. Como esta sustancia puede ser tóxica si no se diluye adecuadamente, lo más recomendable es tomar gránulos de 15 CH. Solo deja que se derritan debajo de la lengua. Debe comenzar con 5 gránulos (que se deben tomar cada 2 horas), luego reducir gradualmente las dosis, hasta que los signos desaparezcan.
¿Cuándo consultar a un médico?
Tan pronto como aparezcan los primeros síntomas característicos de la enfermedad (dolores de cabeza inusuales e intensos, vómitos, rigidez o dolor al doblar el cuello), se recomienda consultar a su médico. Solo él puede determinar la causa y el tratamiento del síndrome meníngeo. Se recomienda encarecidamente la consulta médica para bebés y niños. De hecho, en el caso de la meningitis no tratada, las secuelas serán irreversibles.