El hipo es un reflejo involuntario caracterizado por la vibración de las cuerdas vocales. El origen conocido del hipo es la distensión de los nervios en el diafragma que causa un espasmo del nervio esofágico. La frecuencia de un ataque de hipo varía de un individuo a otro y depende del origen de la estimulación en los nervios frénicos. Hay varias causas de hipo que tienen en común que están controladas por unas pocas vértebras cervicales, que actúan como un centro de hipo. En la mayoría de los casos, el hipo se atribuye a una comida abundante, al exceso de bebidas carbonatadas o alcohólicas, a un cambio brusco de temperatura, al tabaquismo, a los cambios de humor y al estrés.
Síntomas
El hipo se manifiesta por espasmos de diversa duración y frecuencia. En el caso del hipo benigno, el espasmo puede ser espasmódico y breve. Pero se dice que el hipo es persistente cuando dura uno o dos días enteros, y los ataques se repiten repetidamente. Cuando el hipo provoca insomnio u otros trastornos fisiológicos, como la pérdida de peso, y dura más de un mes o incluso un año entero, se denomina hipo refractario. En este último caso, el hipo se asocia con diversos síntomas de cualquier enfermedad que afecte al diafragma.
Tratamiento para detener el hipo
Ya sea que se trate de un hipo benigno o de un ataque que se repite a intervalos regulares, para detenerlo, la homeopatía recomienda principalmente remedios a base de Cyclamen europaeum y Cuprum. Este último se puede combinar con Hyosciamus niger o Nux vomica, si el hipo se produce con bastante frecuencia después de la comida. Cuprum arsenicosum es un tratamiento básico utilizado en muchos casos de hipo.
Tratamiento del hipo persistente y refractario
Para los casos de hipo que parecen prolongarse con ataques repetitivos de una duración bastante larga, Kali bromatum es una solución homeopática de eficacia aprobada. Pero si la contracción es difícil de detener, se puede usar Ranunculus bulbosus para reducir el hipo espasmódico. Cabe señalar que para aliviar la irritación frénica, principal causa del hipo recalcitrante, es necesario renovar el uso de remedios.
Manejo del hipo en los bebés
En los bebés, el hipo puede ocurrir inesperadamente y una convulsión puede prolongarse por falta de atención adecuada. En general, unos pocos granos de Cuprum, Hyosciamus o Stramonium son suficientes para detener un ataque. Pero si el hipo se produce ocasionalmente después de la alimentación, podemos indicar Teucrium Marum. Este remedio también está indicado para casos de hipo en pequeños glotones. Si el ataque se alterna con bostezos, Ignatia amara se puede combinar con los otros remedios.
¿Cuándo consultar a un médico?
En general, el hipo se produce y se disipa de forma natural. Sin embargo, es importante consultar a un médico cuando el hipo dura de manera anormal durante varios minutos o se repite regularmente durante el día. Una consulta médica también es esencial tan pronto como el hipo cause quemaduras o dolor visceral.
