Hay dos tipos principales de sangrado: el sangrado externo y el sangrado interno. La forma externa puede ser causada por una lesión o una mala cicatrización, mientras que la hemorragia interna puede deberse a una hemorragia digestiva o a una ruptura de los vasos sanguíneos o de una arteria. Si el sangrado es demasiado severo y el sangrado es demasiado abundante, debe llamar para pedir ayuda médica. Sin embargo, la homeopatía es eficaz en el tratamiento de pequeñas hemorragias siempre que se respeten las dosis prescritas.
Síntomas de sangrado
Es fácil distinguir los diferentes tipos de sangrado por sus síntomas. La liberación de sangre en el momento de un ataque de tos puede indicar un empeoramiento de la neumonía, pero también es el síntoma principal de la tuberculosis. La presencia de sangre en la orina a veces indica un fibroma. La sangre en las heces acompañada de diarrea significativa puede diagnosticar colitis ulcerosa. Esta enfermedad también genera una gran fatiga y una rápida pérdida de peso con fiebre en algunos casos.
Tratamiento de los diferentes tipos de hemorragia
La hemorragia interna es la más frecuente, sobre todo la que afecta a las arterias. En este caso, se debe tomar Opium 7 CH mientras se espera a que llegue la ambulancia. Las enfermedades cardíacas también pueden causar sangrado y el mejor remedio es Helleborus 7 CH. El sangrado digestivo a menudo es causado por una afección estomacal y si el sangrado dura más de un cuarto de hora, se recomienda tomar China 5 CH. En la misma línea, un trastorno digestivo grave puede causar sangrado anal y la solución es tomar Collinsonia 5 CH. Tomar Ipeca 5 CH durante 7 días o hasta que se detenga el sangrado está indicado para tratar el sangrado que acompaña a la tos, especialmente los agravados por la neumonía.
Tratamiento de la hemorragia postoperatoria Después de
la cirugía, la hemorragia a menudo se debe a una mala cicatrización, y muchos tratamientos homeopáticos pueden reducir el dolor y acelerar la reconstrucción del tejido. Uno de los mejores remedios es el árnica montana, que estimula la curación y tiene un efecto analgésico. La ventaja de tomar este remedio homeopático es que se puede tomar además de los tratamientos convencionales como los anticoagulantes. Este remedio también es efectivo después de los procedimientos dentales, especialmente en las encías. Muchos pacientes lo usan para detener el sangrado intermitente. Si el sangrado es significativo, debe recurrir a China 9 CH, pero se recomienda consultar previamente con un homeópata. De hecho, este remedio no está indicado para personas demasiado sensibles.
Tratamiento de las hemorragias nasales Las hemorragias nasales
son la hemorragia más común y son una enfermedad leve en la mayoría de los casos. De hecho, la nariz tiene muchos vasos sanguíneos y un choque demasiado violento puede romper las distintas arterias. Esta hemorragia afecta especialmente a los niños y el primer remedio es el Millefolium que actúa contra todo tipo de sangrado. Si la hemorragia se acompaña de migraña, Melilotus officinalis debe tomarse en dosis bajas. El árnica montana también está indicado contra el sangrado nasal después de choques violentos. Detendrá inmediatamente el sangrado y reducirá el dolor. El árnica Montana está disponible en forma de gránulo que se coloca debajo de la lengua durante unos minutos. Si el paciente sufre de nasofaringitis con hemorragias nasales, el remedio recomendado es Ferrum phosphoricum 9 CH que se toma tres veces al día, a razón de 5 gránulos por dosis. La homeopatía puede combatir muchos tipos de hemorragia, pero debe tenerse en cuenta que los tratamientos a menudo se deben realizar a largo plazo. Se cree que combinar la homeopatía con un tratamiento convencional da mejores resultados.
¿Cuándo consultar a un médico?
A veces, el sangrado no se detiene a pesar de los diversos tratamientos. En este caso, debe consultar a un médico lo antes posible o acudir a la sala de emergencias. Este es particularmente el caso de las hemorragias nasales, que se consideran una infección leve, pero este síntoma puede ocultar una inflamación del área nasal o una infección de garganta. La hemorragia nasal también se produce en casos graves de neumonía.