La gingivorragia es una inflamación que se produce en las encías. En ocasiones, puede ser de origen farmacológico y en este caso, el uso de anticoagulantes, vitamina K o antitrombolíticos puede ser el responsable. Enfermedades como la fiebre hemorrágica y el síndrome de hemorragia difusa también pueden causar gingicorregia, al igual que los trastornos de las encías como la piorrea. Por último, la hemorragia de las encías también puede producirse tras trastornos más graves como la leucemia, la deficiencia de vitaminas y la cirrosis hepática.
Síntomas de la gingivorragia
La gingivorragia o hemorragia gingival se manifiesta por sangrado de encías acompañado de dolor y se nota por la presencia de sangre en el cepillo de dientes después del cepillado. El sujeto con gingivorragia segrega abundante saliva y a menudo emite mal aliento. Estos síntomas también pueden ir acompañados de encías ulceradas y sequedad de boca. Los dientes también pueden aflojarse y volverse móviles y frágiles. En algunos casos, incluso puede haber hinchazón de las glándulas salivales con o sin dolor.
Tratamientos homeopáticos recomendados
Para reducir el sangrado espontáneo o causado por el cepillado, es recomendable optar por remedios como Kalium Bichromicum y Mercurius Solubilis. Para calmar las ulceraciones malignas que puedan aparecer en alcohólicos o sifilíticos, se recomienda administrar a la persona afectada 5 gránulos de Lachesis mutus 7 CH cada 3 horas, teniendo en cuenta que las dosis deben espaciarse en función de la mejoría de los síntomas. También hay que tener en cuenta que el Kalium Phosphoricum puede utilizarse para tratar eficazmente la gingivorragia en sujetos asténicos o en personas mayores.
Si la gingivorragia se acompaña de sequedad de boca, aftas y sabor amargo, se recomienda tomar 5 gránulos de Nux Vomica dos veces al día hasta su mejoría. Si las encías tienen ulceraciones e hinchazones y si los dientes se han vuelto muy sensibles a las variaciones de temperatura y a los alimentos al masticar, se debe utilizar Amonio Carbonico y Fosfórico Ácido. Para tratar la gingivorragia con encías inflamadas, es aconsejable mezclar Baryta Carbonica 1 a 3 CH con Baryta Carbonica 9, 15 o 30 CH en dosis espaciadas. En baja dilución, este remedio se utiliza para detener la evolución esclerótica, mientras que en alta dilución, permite tratar el trastorno a largo plazo.
¿Cuándo consultar a un médico?
La consulta médica es necesaria cuando el sangrado es repetitivo durante el cepillado. El aflojamiento de los dientes, la aparición de dolor en las encías o la presencia de fiebre también son signos de alarma. La existencia de ganglios linfáticos debajo de la mandíbula o un área indurada en la boca son signos que justifican una consulta médica.
